Con motivo del estreno del espectáculo de Luis Moreno, ¿Y este quién es?, en el Teatro Galileo, me he reunido con él para conocer mejor su trayectoria, su universo artístico y todas las referencias que conviven en este show donde se mezclan música, comedia e imitaciones con una banda de rock en directo.
Luis Moreno (Madrid, 1984) es una persona cuyos intereses le han llevado, una y otra vez, a meterse en lugares que, a priori, no parecían hechos para él. Sin haber cursado música previamente, decidió estudiar Magisterio Musical movido por la curiosidad de entender cómo se produce y se crea esta disciplina, y desde 2007 ejerce como maestro. Antes de dedicarse a la docencia pasó por muchos otros trabajos: repartidor de propaganda desde los 16 años, monitor en una granja escuela y en campamentos, azafato, acomodador, cuidador de niños, profesor de clases particulares… la lista es larga.
Durante la carrera —que cursó por las mañanas mientras compaginaba el estudio trabajando en McDonald’s por las noches— se rodeó de músicos, lo que despertó todavía más su interés por este mundo y le llevó a estudiar batería, primero de forma autodidacta y después con profesores particulares.
Tras pasar por varias bandas y proyectos, terminó trabajando como baterista en Obladi Records, productora liderada por Mario Frasco. Después de muchos conciertos, horas de carretera y risas en la furgoneta, Mario le propuso crear un show de comedia con banda de rock en directo. Luis se negó al principio, argumentando que él no sabía nada de comedia más allá de decir las cosas graciosas que se le ocurrían en cada momento. Sin embargo, Mario insistió porque veía un claro potencial en él.
Una vez más, Luis decidió hacer la casa por el tejado y empezó escribiendo un primer texto. Más tarde comenzó a formarse como cómico. Tras dos cursos de monologuista, un par de años de experiencia en el stand-up con el espectáculo “El Circo de los Errores”, varias revisiones y cambios sobre ese texto inicial y mucho trabajo, nace por fin el show de comedia “¿Y este quién es?”.
El espectáculo propone un viaje por las dificultades del anonimato en el mundo artístico y por las complicaciones que puede traer el extremo contrario: la fama. En él, Luis despliega todas sus inquietudes —la música, la comedia y las imitaciones— apoyándose en vídeos con sketches, la participación del público y una banda de músicos profesionales que interpretan en directo grandes temas de la historia del rock y del pop que han marcado a varias generaciones.
No os perdáis todo lo que me contó en la siguiente entrevista:
1. ¿Cuál es el origen del espectáculo y cómo lo has ido desarrollando hasta día de hoy?
Como tantas otras cosas… de casualidad. Yo trabajo desde hace unos cuantos años tocando la batería en varios proyectos en Obladi Records, que es la misma productora que lleva este show. En esto de la música se echan muchas horas en la furgoneta y en la nuestra se dicen muchas tonterías y cosas graciosas. Mario, el jefe de la productora, cuando algo que yo decía le hacía mucha gracia fantaseaba con montar conmigo algún show de comedia. Un día les mandé un audio imitando a Robert de Niro y ahí ya me hizo la propuesta formal, que yo de primeras decliné… a la vista está que mi negación sirvió de poco…
Desde eso al estreno han pasado dos años de mucho trabajo. El propio texto ha ido evolucionando mucho durante todo este periodo mientras se hacían otras muchas cosas como composiciones de temas propios para el show, grabaciones, ediciones… Ha sido muy laborioso conseguir que exista, pero estamos muy contentos con el resultado.
2. ¿El mayor desafío que te ha supuesto y, por otra parte, el mayor placer?
Pues el mayor desafío sin duda fue empezarlo de cero. Yo estaba obsesionado con que tenía que ser un show diferente a todo lo que ya hay y que tenía que mezclar todas mis inquietudes (música, imitaciones, comedia, interacción con el público…). Hacer que eso se convirtiera en algo real y de calidad no fue fácil, pero sí muy orgánico, una cosa iba llevando a la otra y todo iba encajando en su sitio.
Mi mayor miedo era que por querer abarcar tantas cosas, me quedase un poco a las puertas de todas, pero no ha sido así, todo lo contrario. Ha terminado siendo un show muy completo.
Sin duda alguna, la mayor satisfacción es llevarlo al escenario y ver cómo la gente no para de reír, aplaudir y cantar.
3. ¿Cuáles han sido tus últimos descubrimientos musicales?
La verdad es que me cuesta descubrir grupos nuevos porque me gusta mucho escuchar cosas de épocas anteriores. Aún así siempre hay alguno que empiezo a escuchar y me llama la atención. Últimamente lo ha hecho el grupo Arde Bogotá, que se ha atrevido a hacer rock en tiempos en los que hay que ser un poco valiente al apostar por este género y además le han aportado su propio estilo. Me escucho mucho también el último disco de Litus y el último disco en directo de Los Zigarros. Además me ha dado por las sesiones que cuelga en YouTube Martin Miller.
4. ¿Y la banda sonora de tu vida?
Pues de niño escuchaba lo que le gustaba a mis padres, que básicamente era el disco del “Caribe Mix” del año correspondiente en bucle. Como no había otro disco, pues no escuchaba mucho más. Un día en la tele salió de casualidad “Basket Case” de Green Day y mi vida cambió para siempre. El rock llegó a mi corazón para quedarse.
A partir de ahí empecé a escuchar un montón de géneros y eso me encantaba y me encanta. Mis vecinos tienen que alucinar un poco porque en mi casa un día suena Metallica y al día siguiente ABBA.
5. ¿Cómo recuerdas tus años en el estudio de Magisterio Musical y qué puedes compartirnos de recuerdos o experiencias de aquella etapa?
Pues fueron sin duda unos años inolvidables, geniales. Aunque la cosa empezó muy diferente. Me metí en Magisterio Musical sin tener ni idea de música. Siempre tuve mucho oído y me encantaba hacer ritmos con lo que fuera, pero no tenía ni idea de lo que estaba haciendo. Cuando llegó el momento de elegir carrera yo decidí que quería aprender música y quería enseñar todo eso que aprendiera.
En mi cabeza todo sonaba fenomenal, pero luego llegó el primer día de universidad, preguntaron quién no sabía nada, levantamos la mano tres de unos 60 y se me vino el mundo encima. El propio profesor nos dijo que lo mismo no habíamos elegido bien y que igual necesitábamos ayuda para estar al nivel de los demás. Imagínate mi cara al llegar ese primer día a casa intentando fingir que todo había ido bien y pensando “cómo les digo yo ahora que me he equivocado de carrera por cabezota, con el dinero que cuesta la universidad…”
Las primeras semanas fueron duras, pero poco a poco vi que si ponía de mi parte podía sacarlo y mis compañeros, que eran estupendos, todo hay que decirlo, me ayudaron muchísimo. Al final fueron tres años maravillosos en los que disfruté mucho estudiando.
6. ¿Cómo surge el equipo de la obra y los músicos que te acompañan?
Bueno, el equipo vino un poco solo porque somos básicamente los mismos que estamos trabajando en otros proyectos de Obladi Records, la productora del show. Cuando surge la idea de montar “¿Y este quién es?” nadie lo duda un momento y todo el mundo se sube rápido al carro. Llevamos muchos años tocando juntos, somos amigos y eso se nota mucho en el escenario. Con mirarnos ya nos entendemos.
7. ¿Qué es lo que más te atrae o te atrapa como espectador del mundo de la comedia? ¿Qué recuerdos nos puedes compartir de «El Circo de los Errores»?
Cuando voy como espectador a ver comedia lo que más me gusta es ver la cantidad de maneras distintas que hay para hacer reír y cómo todas son igual de válidas. Yo creo que me pasa igual que con la música.
“El Circo de los Errores” fue el show con el que me empecé a curtir en la comedia. Por suerte no tengo que echarlo de menos porque sigo haciéndolo y me encanta. Es un espectáculo que hacemos dos cómicos más y yo (Víctor Trenado e Iván Korpy, muy buenos). Es más pequeño pero tiene mucho encanto, es muy divertido y aporta también algo diferente ya que tiene comedia, magia y música.
8. ¿Qué te llevas de la etapa de Obladi Records?
Obladi Records es la productora de “¿Y este quién es?” y llevo en ella ya varios años trabajando en otros espectáculos como “KidsRock Family”, un show para toda la familia que repasa la historia del rock, y “Pop del Arte”, una banda de versiones que es la que toca también en “¿Y este quién es?”.
La verdad es que trabajar en Obladi es saber que va a haber un nivel de calidad musical y humano difícil de encontrar. Por eso nos llevamos tan bien.
9. ¿Un concierto que te haya marcado especialmente y alguno al que tengas pendiente poder asistir?
Me impactó mucho un concierto de Vetusta Morla que vi hace ya unos cuantos años en el Circo Price, porque hicieron parte acústico, parte eléctrico y parte sinfónico. Fue toda una experiencia.
Y me encantaría ir a ver a Paul McCartney en directo, aunque lo mismo cuando empiecen a tocar me desmayo de la emoción allí en medio cual groupie.
10. ¿Algo más por aportar o añadir a la entrevista?
Solo darte las gracias a ti por tus preguntas y a toda la gente que está recibiendo con tanto entusiasmo y cariño el show de “¿Y este quién es?”.
Esther Soledad Esteban Castillo
