El músico presenta Juglar, un trabajo que nace desde la experiencia personal y vital, con una mirada poética y callejera. En esta conversación nos habla sobre el proceso creativo, sus influencias, recuerdos y sueños.

1. El proceso de composición, grabación y lanzamiento

Las canciones nacieron en la época de Noches alegres…, con la intención de tener voz propia y una temática vital marcada por la vida nocturna y etílica. Quise unir lo lírico con lo público, lo poético con lo mundano, y acuñé el método: “Haga rock con 500 palabras”.

La grabación no fue en estudio, sino tres noches sobre el escenario con cuatro músicos, compartiendo con la audiencia. El lanzamiento, en cambio, ha sido civilizado y profesional. Muy raro.

2. ¿Vida de gato, de perro o de borracho profesional?

Ninguna es fácil. La del perro no es cómoda, pues entregan su libertad a la mano que les alimenta. La de borracho profesional requiere facultades y dedicación diaria. Prefiero la del gato, que conserva su independencia y elegancia. “Vida de gato” alude en realidad a la vida en Madrid, la de los madrileños.

3. Del disco Noches Alegres, Mañanas Tristes a Juglar

Ahora hay más reposo y menos urgencia. Las canciones vienen más despacio e independientes. Hay nexo de unión, pero también ruptura de códigos previos. Estoy en mitad del camino.

4. Influencias musicales

Autores para quienes la letra es esencial: José Alfredo Jiménez, Bob Dylan, Discépolo, Sabina. Pertenezco a la canción popular: texto y música para contar historias. Mis influencias se amplían, pero lo que me gustaba hace veinte años sigue gustándome.

5. Moscú en Juglar. Tres lugares significativos

El suelo que piso, la luna y cualquier escenario.

6. Concierto inolvidable y otro para olvidar

El primero: Psilicon Flesh en Valladolid, Café Lisboa. Tenía 13 años, me impresionó todo y hasta nos tiramos del escenario. Una semana después vimos a Australian Blonde, pero nos marchamos tras “Chup, chup” por parecernos blandos.
Los de olvidar ya los he olvidado.

7. Un sueño cumplido y otro por cumplir

Soñar es para soñadores. Yo busco atrapar trozos de felicidad en el ahora. La vida es absurda, pero a veces te da treguas inesperadas.

8. Concierto perfecto

Debe ser único. Los músicos tienen que tocar como si fuera la primera o la última vez. El público debe entregarse. Buen sonido, cerveza fría y chicas, también ayuda.

9. Próximos retos

Mantenerme vivo y cuerdo, cuidar de los que me cuidan, tener el corazón en su sitio. Musicalmente: buenas canciones, discos y conciertos, y disfrutarlos.

10. Tres cosas indispensables en un día de Gatoperro

Días diferentes, sin rutina. Lo indispensable es estar en movimiento.

11. Algo más que añadir

Gracias a ti y un saludo a quienes lleguen hasta el final. Hachís y mucha fibra.