Hoy os traigo mi entrevista con Amaranta Osorio con motivo de la publicación de su nuevo libro La Trilogía del Recuerdo. Con este lanzamiento he podido acercarme más a su obra y a su mundo artístico, y a continuación os dejo más información sobre ella y la entrevista para que podáis ver todo lo que tiene para contarnos.
Amaranta Osorio es autora, actriz y gestora cultural que vive a caballo entre México, Colombia y España. De su generación, es una de las autoras latinoamericanas más estrenadas en Europa. Sus obras teatrales han recibido premios como el Calderón de Literatura Dramática o Jesús Domínguez, entre otros, y han sido estrenadas en España, Chile, Colombia, México, Argentina, Portugal, Checoslovaquia, India, Dinamarca, Serbia y Alemania.
Ha publicado dieciocho obras en España, Francia, Cuba y México con editoriales como Primer Acto, Ediciones Invasoras, Assitej, Koïnè, Presses Universitaires, Alarcos y Fundamentos. Entre sus publicaciones recientes destacan Mapa y Guerra-Perra en Ediciones Invasoras, así como Clic, quand tout bascule en la editorial francesa Koïnè. Algunas de sus obras han sido traducidas al francés, portugués, inglés, alemán, checo y griego.
Su dramaturgia se centra en temas comprometidos socialmente, especialmente historias protagonizadas por mujeres. Ha dirigido cinco festivales internacionales en Costa Rica, México y España, y programado dos en India y México. Coordina el encuentro Otras Miradas dentro del Festival Iberoamericano del Siglo de Oro en Alcalá.
1. ¿Cómo nace “La Trilogía del Recuerdo” y cómo has vivido todo el proceso hasta su lanzamiento?
Siempre me ha interesado revisitar la historia y cuestionarla. Especialmente porque la historia que yo aprendí siendo niña apenas mencionaba a las mujeres. Por eso, en muchas de mis obras busco hablar de la historia desde nuestra perspectiva y rescatar a mujeres importantes que han sido olvidadas.
Juan Mayorga, en su ensayo El dramaturgo como historiador, dice que la misión del teatro histórico es “ver con asombro lo ya visto, ver lo viejo con ojos nuevos”. Esa fue mi intención al visitar el pasado con una nueva mirada.
La Trilogía del Recuerdo comenzó como un proyecto para el Sistema Nacional de Creadores del FONCA en México. Me concedieron la beca de tres años y el proyecto original incluía Mapa (sobre desplazamiento forzado), Las nietas (sobre descendientes de mujeres que vivieron la guerra) y Akuakuaue (sobre una especie en extinción).
Pero tuve que cambiarlo porque, mientras escribía Las nietas, murió mi madre de forma repentina y me bloqueé. Una amiga me dijo: “¿Por qué no escribes sobre lo que te está pasando?” y así nació Sobre tus alas, una autoficción sobre el duelo.
Más tarde, mientras trabajaba en Akuakuaue, Sanchis Sinisterra me invitó al Club Benjamín, y allí surgió Regresar es irse, sobre el exilio republicano en México. La obra nació gracias a la investigadora Nuria de Orduña, quien me habló de María Luisa Elío y me ayudó con la investigación.
2. ¿Cuál ha sido el mayor placer y el mayor desafío de esta trilogía?
El mayor placer ha sido escribirla. El mayor desafío: leer testimonios de refugiados, investigar fosas comunes, historias de la Guerra Civil, la crisis climática y la extinción animal. Cada día desaparecen unas 150 especies.
Lo más duro fue escribir sobre mi vida: la muerte de mi madre y el final de un matrimonio de quince años. Pero escribir me sanó.
3. ¿Cómo recuerdas el nacimiento de tu amor por el teatro y su evolución?
Nací en una familia teatral. Siempre sentí que el teatro era mi hogar. En los últimos años escribo más de lo que actúo.
4. ¿Qué obras y autores te han marcado?
Muchísimas, me resulta difícil escoger solo unas pocas.
5. Tus últimos descubrimientos literarios, teatrales o cinematográficos
Recomiendo: La peor madre del mundo de Nuria Labari, El celo de Sabina Urraca, Isla partida de Daniela Tarazona y La sierva implacable de Ana Castro.
También he leído Ales junto a la hoguera de Jon Fosse y Malaherba de Manuel Jabois.
Actualmente estoy leyendo Pipas de Esther L. Calderón, El invencible verano de Liliana de Cristina Rivera Garza, La invención de todas las cosas de Jorge Volpi y Pasar a limpio de Itziar Pascual.
En teatro recomiendo: Casting Lear de Andrea Jiménez; 14.4 de Juan Diego Botto, Sergio Peris-Mencheta y Ahmed Younoussi; Nevenka de María Goiricelaya; Marcela de María Folguera; Carmen, nada de nadie dirigida por Fernando Soto; y los trabajos de Marta Pazos.
6. ¿Qué debe tener un proyecto para robarte el corazón?
Recuerdos, humanidad, bondad y esperanza.
7. Tu último sueño cumplido y uno pendiente
Mi último sueño cumplido: publicar este libro. Ya sumo 21 obras publicadas y 29 producciones.
Mi sueño pendiente: lograr un trabajo que me dé estabilidad económica para seguir escribiendo. A nivel creativo, ahora sueño con escribir narrativa. Ojalá tener una beca o sponsor que me permita dedicar un año a ello.
8. ¿Cómo viviste “Latidos de Vida y Vuelta”?
Fue un encuentro maravilloso, con ponentes brillantes y diálogos profundos entre artistas y gestores culturales de Europa y América Latina. Todos coincidimos en que el mestizaje cultural genera obras hermosas.
Me encantaría repetirlo. Ojalá se pueda. Tengo muchas ganas de volver a Cádiz.
9. ¿Algo más por aportar?
Mi teatro es una invitación al diálogo entre culturas y con la naturaleza. Todos los relatos merecen ser escuchados.
Ojalá algún día podamos hacer paz con nuestra memoria.
Esther Soledad Esteban Castillo

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