
Hoy os traigo mi entrevista con Rocío Vidal, donde hablamos sobre Esta sí tenemos que bailarla, un proyecto que ha vivido de la mano de Nando López y Eva Egido. A través de esta conversación, Rocío nos comparte cómo ha sido el proceso creativo y escénico, y todo lo que la función ha significado para ella en lo personal y en lo profesional. Os dejo la entrevista a continuación para que podáis descubrirla a fondo.
1. ¿Cómo creéis que sería para vosotros si asistieseis a ver esta función como espectadores?
La función tiene tanto de nosotras que sería prácticamente un reencuentro con los temas que nos preocupan y que decidimos que aparecieran junto con Nando López, su autor. Creo que agradecería la franqueza con la que hablamos de la maternidad o la muerte y la risa como herramienta vital para la supervivencia, la desmitificación del éxito o el derecho a rendirte.
2. ¿Qué te ha supuesto o crees que va a suponerte personalmente esta función?
Por un lado, hay una satisfacción enorme en sacar adelante tus propios proyectos, y por otro, me supone un ejercicio de libertad darle voz a otras opciones de vida como la de Diana. Recordar a través de las dos la importancia de la sororidad, una ayuda que se nos ha negado históricamente en un intento de enfrentarnos para debilitarnos y que en esta noche tan especial que atraviesan juntas me recuerdan que sí es posible, que sí es necesaria y que es nuestro tiempo.
3. ¿Cuál crees que es el mayor placer y el mayor desafío de esta función?
El mayor placer es poder reírte de tus miserias y que esa actitud revierta en ti misma. Hay al mismo tiempo momentos duros en la función que hay que atravesar, pero sin duda es mayor la conexión con la propia vida a la que te lleva este viaje y que te hace terminarlo renovada y sobre todo, esperanzada. Hacerlo además junto a Eva Egido, a la que quiero y admiro, es un placer y un disfrute añadido. El mayor desafío es hacer que ese encuentro y lo que le sucede parezca casual, inesperado, real, cada noche. Pero qué hermoso descubrir al otro cada día.
4. ¿Qué rescataríais del proyecto respecto a proyectos anteriores que os gustase repetir en el futuro?
La escritura del texto a pie de escenario, sin duda. Ya en el primer proyecto en el que coincidimos, #malditos16 dentro del programa Escritos en la escena del Centro Dramático Nacional, trabajamos a través de este formato, realizando un taller donde las tres hemos participado activamente y hemos volcado nuestras experiencias. Con el material que surge cada día, Nando iba escribiendo las distintas escenas y las probábamos en ensayo hasta darle la forma definitiva.
5. ¿Un recuerdo de una noche que os marcase en vuestra vida que queráis compartir?
La noche en que se estrenó la serie de La edad de la ira, basada en la novela y obra teatral de Nando López, fue una noche de celebrar nuestra amistad, de compartir el logro de nuestro amigo, su compromiso con la educación y el colectivo LGTBI y de brindar por ello. Creo que hay mucho de aquella noche en Esta sí tenemos que bailarla. Y por supuesto, bailamos sin parar.
6. ¿Qué banda sonora os ha acompañado en vuestra vida o qué temas no podríais dejar de bailar?
La presencia y el valor de Raffaella Carrá en la función puede parecer anecdótico, pero no lo es. Fue una mujer muy adelantada a su tiempo: liberal, feminista, icono del colectivo, empresaria, una artista completa y una mujer que tenía la capacidad de encandilar a todas las ideologías, géneros y esferas sociales. Y sin duda, su música está en los primeros lugares de nuestra playlist vital. ¿Quién no ha cantado y bailado su “¡Fiesta!”?
7. ¿Qué tiene que tener un proyecto para enamorarte bien sea artísticamente o de forma personal?
En este oficio a menudo la inquietud artística y personal se dan la mano. Pero sí que es cierto que estamos en un momento donde lo ideológico tiene más peso para mí, si tuviera que establecer alguna prioridad. El teatro debe ser una tribuna desde la que cuestionar, proyectar y analizar la realidad. Y es la trinchera que muchos hemos elegido para recordar y experimentar que otro mundo es posible, que el teatro es un espacio de paz y de libertad y que a través de él podemos acercarnos a ese otro mundo, más justo, más abierto, más plural y con cabida para todos.
8. ¿Futuros retos o proyectos?
Nuestro proyecto más inmediato es que nos podamos mantener en Madrid y que el espectáculo pueda tener la gira que nos gustaría. Hay muchos lugares que se han interesado por el proyecto pero ahora toca encajarlo con las fechas del equipo.
9. ¿Algo más por aportar o añadir a la entrevista?
Que nos encantaría que viniéseis a conocer a Leyre y a Diana. ¡Os esperamos!
Esther Soledad Esteban Castillo

