Especial entrevistas feministas: Entrevista a Beatriz Argüello

Beatriz Argüello - entrevista feminista

Seguimos con el especial de entrevistas feministas con Beatriz Argüello, donde nos acercamos a su pensamiento sobre el feminismo y también nos cuenta algunas anécdotas e historias sobre su carrera y su vida para poder conocerla mejor.

Actriz con un amplio recorrido profesional, ha participado en más de una veintena de montajes de diversas compañías con directores como Miguel del Arco, Juan Carlos Pérez de la Fuente, José Luis Gómez, Eduardo Vasco, Gerardo Vera, José Pascual, Carlos Marchena y Götz Loepelmann, entre otros. También ha dirigido Estaciones de Isadora, de Hugo Pérez de la Pica.

Estudió interpretación en la Escuela de Arte Dramático de Ángel Gutiérrez y con José Luis Gómez en el Teatro de La Abadía, formando parte de la primera promoción de actores de esta institución. Se formó en danza clásica y contemporánea en el Real Conservatorio del Escorial. Ha participado en seminarios con Jacques Lecoq, Maurizio Scaparro, Agustín García Calvo, Tapa Sudana o Marcello Magni. Fue bailarina en la compañía profesional de danza Alabama Dance Theatre en Estados Unidos.

En 2016 recibió el Premio Miguel Mihura a la mejor actriz de teatro.

1_¿En qué momento decidiste dedicarte al mundo artístico? ¿Has tenido miedo en alguna ocasión o algún impedimento?

Pues bastante joven. Cuando era niña comencé a ir a clases de ballet en el Conservatorio de El Escorial y, ya a los dieciocho años, me metí de lleno a estudiar teatro. No dudé en ningún momento de lo que quería hacer.

Por suerte he tenido siempre el apoyo de mi familia, y en especial de mi padre. Él fue actor en la época del teatro independiente; de hecho, mis padres se conocieron en el Institut del Teatre de Barcelona estudiando ambos interpretación.

2_¿Notaste que has tenido más dificultad que tus compañeros masculinos para progresar o alguna diferencia notable en proyectos o papeles, o ha sido todo igualitario?

Al principio no tenía esa noción de desigualdad. Es verdad que era muy joven cuando empecé a trabajar en el teatro profesional y no me daba cuenta. Ahora, al echar la vista atrás, sí que he vivido situaciones en las que se me ha preguntado si tengo hijos o cómo me organizo con ellos en las giras, durante los ensayos, etc. Preguntas que normalmente a los hombres no se les hacen.

3_¿Puedes destacarme algún personaje interpretado por alguna actriz, alguna película y alguna artista musicalmente hablando que te haya marcado en tu trayectoria?

Los personajes femeninos de un director de cine polaco llamado Krzysztof Kieslowski me marcaron hace años, y estuve “enamorada” de Irène Jacob en La doble vida de Verónica durante mucho tiempo.

4_¿A lo largo de tu carrera has visto evolucionar en el arte el mundo feminista y el papel de la mujer? ¿Cómo valoras la evolución que ha tenido su representación en los medios?

Sí, creo que hubo un punto de inflexión en el feminismo aquel 8 de marzo, cuando estalló una conciencia colectiva como mujeres unidas ante una desigualdad que nos lastra a todos los niveles desde hace muchísimo tiempo.

Valoro la evolución que está teniendo el camino feminista, pero echo de menos más velocidad hacia la igualdad. A veces da la sensación de que caminamos muy despacio e incluso hay momentos de regresión y estancamiento. Las medidas de igualdad entre hombres y mujeres son tomadas por hombres y esto debe cambiar; si no, será imposible avanzar.

5_¿Qué peticiones, causas o situaciones crees que deberían mejorarse respecto al papel de la mujer en la sociedad?

Primero, tener la voz de una feminidad positiva y sin rencor. Sé que es difícil, pues estamos heridas por el patriarcado de siglos y porque aún se nos mata y viola a estas alturas del partido. Hay mucha violencia sobre la mujer, pero no podemos combatirla con lo mismo. Hay que generar una voz nueva de cambio para ir rompiendo la estructura del patriarcado hacia un nuevo modelo.

6_¿Hay algún personaje en tu carrera que crees que podrías elegir como causa para la lucha feminista?

Justo ahora acabo de terminar El castigo sin venganza, de Lope de Vega. Es fascinante cómo un autor del siglo XVII escribe un personaje femenino como Casandra. Una mujer dentro de una estructura patriarcal terrible en la cual es casada por su padre con un Duque al que no conoce, que la engaña y la desprecia, y ella se rebela ante esto en unos monólogos feministas totalmente contemporáneos.

Esto es un ejemplo de lo que comentaba antes: tampoco hemos cambiado tanto desde el siglo XVII hasta ahora.

7_¿Qué mensaje le darías a todas aquellas mujeres que han podido tener alguna situación o complejidad a la hora de avanzar en su carrera o hayan sufrido algún contratiempo respecto a este problema?

Las actrices hemos estado (y lo seguimos estando) bajo el yugo de la belleza física. El paso de los años es algo que todavía juega en nuestra contra mucho más que en los hombres. A esto se añade que aún vemos bastantes menos personajes femeninos en las obras de teatro y en los guiones.

Creo que tenemos que estar alertas y muy unidas en esta causa común. Debemos apoyarnos entre nosotras y ponernos en valor por lo que aportamos como artistas.

8_¿Tienes alguna mujer como ejemplo fuera del mundo artístico, en el ámbito público y a nivel personal?

Clara Campoamor fue una mujer que luchó por las libertades de las mujeres en nuestro país. Una mujer, como otras muchas a lo largo de la historia, que han abierto las puertas para que las que venimos después lo tengamos más fácil.

Y, a nivel personal, me gustaría mencionar a Olga San Martín, vicepresidenta de la ONG “Olvidados”, que está haciendo una labor magnífica tanto en los campos de refugiados del norte de Grecia como aquí en España, asistiendo a familias con muy pocos recursos y poniendo un énfasis particular en la pobreza infantil.

9_¿A qué personaje del pasado rescatarías —del cine, teatro o alguna serie— y le cambiarías alguna parte de su historia?

Hace unos años interpreté un monólogo teatral de Sarah Kane, 4.48 Psicosis. Es un texto autobiográfico de despedida, ya que su autora se suicidó después de escribirlo. Siempre, en los ensayos y posteriormente en las funciones, deseaba que el final hubiese sido otro y peleaba por que así fuera, aun sabiendo que es imposible cambiar el pasado.

10_¿Cuáles han sido los retos mayores a los que te has enfrentado en tu carrera, que has podido superar y quieras dejar como recuerdo?

Uno de los retos más grandes de mi trayectoria me llegó en el Centro Dramático Nacional, cuando me cogieron para representar a Rosalinda en Como gustéis, de Shakespeare. Protagonista absoluta en una versión musical de un montaje de tres horas, con mis tres niños pequeños en casa y en plena crisis de pareja.

Fue una etapa muy dura, que exigía una fuerza física y mental muy grande para sostener todo aquello. Me recuerdo susurrando siempre a los niños para reservar mi voz para la función. La sensación que tengo, y he tenido siempre, es que tenemos que trabajar muy duro, incluso más que los hombres.

11_¿Algún sueño cumplido para destacar y alguno por cumplir?

Para mí, un sueño cumplido es poder estar sobre los escenarios. Un sueño por cumplir es poder seguir haciéndolo el resto de mi vida y abordar la dirección de escena.

12_¿Quieres lanzar algún mensaje al público y al mundo en general respecto a la lucha feminista para terminar esta entrevista?

Más que un mensaje es una reflexión. Me pregunto cómo se pueden cambiar las cosas de verdad. ¿Es posible hacerlo dentro de la estructura patriarcal? Si no es así, ¿qué modelo proponemos para el cambio?

Son preguntas que os comparto. Lo que sé es que hay que generar diálogo entre nosotras y poner sobre la mesa distintos puntos de vista para poder dar a las mujeres el lugar que nos corresponde.

Esther Soledad Esteban Castillo, Madrid

Deja un comentario