Sara Gómez, nacida en Cáceres, lleva toda una vida dedicada a la interpretación, comenzando a los diez años con la obra La fina y la basta y desarrollando una amplia trayectoria en televisión y cine con trabajos como Bicho malo (nunca muere), Los quién, Gym Tony, Fuga de cerebros u Omnívoros.
A continuación, su aportación al especial de entrevistas feministas, donde conocemos más sobre su trayectoria, su pensamiento y su visión del mundo audiovisual desde el enfoque femenino.
1_¿En qué momento decidiste dedicarte al mundo artístico?
He sido consciente de que lo elegí mucho antes de lo que pensaba. Empecé a hacer teatro con diez años y, aunque luego di muchas vueltas, creo que lo decidí ahí.
¿Has tenido miedo o algún impedimento?
Miedo como tal no… incertidumbre sí, muchas veces. Durante casi cuatro años estuve afónica y fue un gran aprendizaje. Ahora creo que fue una prueba de madurez.
2_¿Has notado más dificultad que tus compañeros masculinos para progresar?
Sí. Es menos probable encontrar personajes femeninos protagonistas con tramas interesantes más allá del romance o del apoyo al personaje masculino. Creo que ahora hay más conciencia y se intenta equilibrar, pero muchas compañeras sí han vivido dificultades.
3_¿Algún personaje o actriz que te haya marcado?
Me encantaba Whoopi Goldberg en Cambio de hábito. Uma Thurman en Una mamá en apuros me fascinó. Carmen Machi en teatro es una delicia. Admiro a las actrices que han luchado y siguen llenando personajes de tanto.
4_¿Has visto evolucionar el feminismo y el papel de la mujer en el arte?
Sí. Nos hemos permitido unirnos, hacerlo visible y accionar. Esa fuerza colectiva ya es imparable. Queda mucho por equilibrar, pero vamos en el camino.
5_¿Qué mejoras propondrías respecto al papel de la mujer en la sociedad?
El uso del lenguaje me parece fundamental. No puede ser que la palabra “feminismo” siga confundiéndose con el opuesto del machismo. Es igualdad. Es educación básica y respeto.
Lo esencial es empezar por una misma: mirarnos, preguntarnos qué podemos mejorar y dejar que esa onda se expanda.
6_¿Qué personaje tuyo vincularías a la causa feminista?
Adela, de La casa de Bernarda Alba. Una mujer oprimida que se suicida al descubrirse un romance prohibido. La represión por amar libremente.
7_¿Qué mensaje darías a mujeres que han vivido dificultades o contratiempos?
Que hablen, que lo compartan, que no tengan miedo. Que se respeten con sus propios límites, pero que sean conscientes y reales.
8_¿Alguna mujer referente fuera del arte o en tu vida personal?
Tengo la suerte de rodearme de mujeres increíbles. Mi madre, mis abuelas… grandes referentes. Ver lo que vivieron también me hace valorar lo que tenemos ahora.
9_¿A qué personaje del pasado rescatarías y qué cambiarías?
No sabría decirte ahora, pero tengo una amiga que sería feliz si Audrey Hepburn siguiera viva y haciendo cine. Se lo dedico.
10_¿Retos superados en tu carrera?
Superar mi miedo con la voz y disfrutar de ella. Hacer una sustitución kamikaze con el teatro lleno sin haber ensayado. La función Beat G en el Matadero fue otro enorme reto.
11_¿Un sueño cumplido y otro por cumplir?
Me siento profesional de mi trabajo, ese es un sueño cumplido. Pendientes me quedan muchos, ¡y más que se me irán ocurriendo!
12_¿Mensaje final sobre la lucha feminista?
El mayor arma es el amor. El miedo busca protegernos, pero amarnos a nosotras mismas es el mejor antídoto. Si duele, no es amor.
Compartir lo que sentimos es valentía. La unión hace la fuerza. Juntas siempre podremos.
Feminismo: Igualdad.
Esther Soledad Esteban Castillo, Madrid
Lunas Pasajeras 