Roger Pol-Droit vuelve a la actualidad literaria con un libro que debería ser de lectura obligada por todos alguna vez en la vida, y más concretamente necesita una lectura cada cierto tiempo para recordar los valores tan importantes e interesantes que plantea y nos transmite.
Todo parte bajo la premisa de que haríamos si nos quedase una hora de vida. A menudo vivimos en una rutina cíclica donde la amargura, el día a día y las obligaciones, el mismo entorno, las mismas ilusiones… nos envuelven en un halo donde la emoción escapa y olvidamos lo importante en la vida y todo lo que de verdad queremos hacer, sin pensar que quizás mañana llegue el fin y nuestros sueños se queden abandonados en esa lista de tareas pendientes que nunca más podremos volver a ver.
Es triste leerlo pero más triste aún es no hacer nada y actuar contra ello. La felicidad es algo que tenemos ante nuestros ojos y en nuestro día a día, olvidamos que para ser felices también hay que aceptar el lado malo de la vida y vivir sin límites y tan solo encontrar la paz, olvidando luchar contra causas perdidas o imposibles que al final acaban con nosotros.
Droit hace un repaso a todos los ámbitos de la vida de una manera distendida, divertida y llena de verdad. Os aseguro que embarcaros en esta lectura será una experiencia muy agradable, además de que la forma en la que está escrita y su estructura también os sorprenderá y facilitará la lectura.
Y tú… ¿qué harías si solo te quedase una hora de vida?.
Esther Esteban, Madrid
Lunas Pasajeras 