ENCUENTRO CON ADAM JEZIERSKI

Tampoco quisimos perder la oportunidad de hablar con Adam Jezierski sobre su divertida y peculiar incursión en El Cojo de Inishmann.

Ante todo, al igual que sus compañeros, se siente muy orgulloso de este gran éxito en unos tiempos tan complicados para el teatro, habiendo visto el patio de butacas lleno en numerosas ocasiones y con el público muy feliz.

Entre los asistentes ha tenido la suerte —y la sorpresa— de ver gente de todas las edades. Recuerda, por ejemplo, una excursión escolar con niños de entre diez y doce años que disfrutaron tanto como el público más mayor. “Es una obra completa que sabe llegar muy bien al espectador”, comenta el actor.

La describe como dos horas de diversión, emoción y asombro para el público.

Sobre su personaje, nos cuenta que es “una burbuja de felicidad”, todo lo contrario a Billy: se amolda y es un superviviente. Para abordarlo, prefirió hacerlo de forma completa y sutil; admira lo divertido que es y su imaginación. Como admite con una sonrisa, se enamoró del texto a primera vista.

No tiene una escena favorita en particular, aunque se divierte mucho cuando comparte escena con Irene Escolar. Sobre la famosa escena de los huevos —que descubriréis cuando vayáis—, reconoce que al principio era algo distinto y novedoso, pero que tras tantas funciones se convierte en una rutina más.

También subraya el gran reparto de la obra, compuesto por nueve actores en los que recae el peso dramático. “Está muy bien escrita; y hoy en día no es fácil mantener una función con nueve intérpretes por los costes”, apunta. Aun así, han formado “una buena pandilla”.

Su mayor desafío en este montaje ha sido volver a empezar de cero tras cinco años sin hacer teatro; el mayor placer, sin duda, encontrar a un director y un texto tan buenos.

Como reto personal, quiere seguir creciendo en este mundo artístico y continuar trabajando. Muy pronto podremos verle de nuevo en la serie Con el culo al aire, y nos adelanta que Javi seguirá dando quebraderos de cabeza a su familia y provocando divertidos conflictos.

Como podéis comprobar, Adam mantiene intacta su esencia cómica y sigue conquistando al público, sea cual sea el medio.

Recomendaciones:

• Libro: El poeta, de Michael Connelly.
• Obra: El Cojo de Inishmann.
• Película: El lobo de Wall Street.
• Canción: “Diez mil maneras”, de David Bisbal.

Esther Soledad Esteban Castillo, Madrid