Tesis sobre un homicidio es un thriller judicial dirigido por Hernán Goldfrid, protagonizado por Ricardo Darín, Alberto Ammann y Arturo Puig. La cinta explora la delgada línea entre justicia, obsesión y moralidad, sumergiendo al espectador en una inquietante historia en la que nada es lo que parece. En esta entrevista conjunta, los actores Ricardo Darín y Alberto Ammann, junto con el director Hernán Goldfrid, desentrañan las claves de la película, el proceso creativo de sus personajes y el enfoque técnico y emocional de la narrativa.
ALBERTO AMMANN
1. ¿Cómo llegaste al proyecto y qué te sedujo más?
Al saber que Ricardo Darín formaría parte ya tenía media decisión tomada. Sabía que no aceptaría un mal guion, y al leerlo me atrapó por completo. Además, trabajar con Ricardo y Arturo Puig era todo un lujo, y el personaje tan complejo fue clave para decidirme.
2. ¿Qué significó para ti interpretar a Gonzalo?
Nunca había interpretado un personaje así. Gonzalo es ambiguo, complejo, constantemente en una cuerda floja. El espectador duda de él como lo hace Bermúdez. Me inspiré parcialmente en el asesino Ted Bundy por esa mezcla de carisma y locura. Fue un reto construir una cabeza tan distinta a la mía.
3. ¿Qué has aprendido trabajando con Ricardo Darín?
Ricardo tiene un talento inmenso. Se mueve en escena con una precisión natural y favorece tu plano de forma instintiva. Su sensibilidad y profesionalismo te enseñan mucho sin decir nada.
4. ¿Ves a Gonzalo como héroe o villano?
Llega con luz, bromea… pero la ambigüedad lo envuelve. A través de la actuación se va sembrando una duda. Su expresividad contradice sus palabras. Es una construcción muy delicada.
5. ¿Te atrae más el teatro, cine o televisión?
El teatro requiere un enamoramiento fuerte. La televisión no me convence por la falta de tiempo para lo creativo. Me seducen los personajes y actualmente barajo un proyecto de serie con humor negro y terror. Pero sigo apostando por el cine.
RICARDO DARÍN
1. ¿Qué te atrajo del proyecto?
Los diálogos son muy pulidos y osados, y el guion ofrece una reflexión sobre poder y justicia. Además, trabajar con Hernán y un equipo tan sólido hizo la propuesta muy atractiva desde el principio.
2. ¿Qué lleva a Bermúdez al borde?
Es un personaje solitario y quebrado. El guion permite al espectador seguirle, abandonarlo y retomarlo. Tiene ideas discutibles pero también humanidad. No propone el juego, pero su rival conoce sus puntos débiles.
3. ¿Qué opinas del rol del espectador como espía?
Me parece brillante. La película convierte al espectador en un detective, le obliga a prestar atención a los detalles. Su final polémico exige continuar pensando, lo cual me parece saludable.




