ENTREVISTA CON… ÁLEX Y DAVID PASTOR

*LOS HERMANOS PASTOR NOS TRAEN LA AVENTURA MÁS INCREÍBLE Y UNA BARCELONA TOTALMENTE DESCONOCIDA*

Álex y David Pastor son dos cineastas catalanes especializados en cine de género, con formación y experiencia internacional. Tras su debut en Estados Unidos con Infectados (Carriers), regresaron a España para dirigir Los Últimos Días, una superproducción distópica ambientada en una Barcelona apocalíptica.

La película plantea una epidemia de agorafobia que obliga a la población a vivir confinada bajo tierra, combinando el cine de catástrofes con una profunda reflexión emocional y social. Con un reparto encabezado por José Coronado y Quim Gutiérrez, los hermanos Pastor llevaron a cabo uno de los rodajes más ambiciosos del cine español reciente. En esta entrevista reflexionan sobre el proceso creativo, los desafíos técnicos, la experiencia de rodar en su ciudad natal y su pasión por el género fantástico.

1. ¿Cómo surgió el proyecto de Los Últimos Días?

Álex Pastor: La idea nació en Nueva York, mientras producíamos Infectados. Una noche observábamos los edificios iluminados y nos preguntamos qué pasaría si, en lugar de parecer islas en la oscuridad, esos edificios ocultaran microcosmos llenos de náufragos atrapados. A partir de ahí surgió la premisa, no como otra historia del fin del mundo, sino como una exploración de sus consecuencias humanas y naturales.

2. ¿Los personajes estaban definidos desde el principio?

David Pastor: Los fuimos desarrollando durante la escritura del guion, pero sí teníamos en mente a actores concretos. José Coronado nos parecía perfecto para el papel, incluso antes del estreno de No habrá paz para los malvados. Nos parecía un actor infravalorado y queríamos reivindicarlo. La combinación con Quim Gutiérrez nos ofrecía un contraste interesante: alguien cercano, un hombre de la calle con el que el público puede identificarse. La diferencia de edad enriquecía esa relación casi paternal, de mentor.

3. ¿Cuál fue el mayor reto a la hora de rodar los escenarios?

Álex Pastor: Cada localización supuso un desafío. El mundo del metro fue especialmente complicado. Tuvimos la suerte de poder rodar en una línea en construcción, algo que fue decisivo, ya que el metro de Barcelona está operativo prácticamente todo el tiempo. Rodar en estaciones reales habría sido inviable.

Las alcantarillas, por ejemplo, son pequeñas, peligrosas y difíciles de iluminar, así que las construimos en unas cavas preexistentes. También hubo que construir aceras e instalaciones que extendimos digitalmente. Rodar en calles céntricas y turísticas fue otra batalla: al Ayuntamiento no le entusiasmaba la idea, pero tras una larga negociación lo conseguimos rodando muy temprano, en domingos.

En definitiva, no hubo escena fácil, pero todo el equipo sabía lo que había en juego y se preparó al máximo.

4. ¿Supuso eso un incentivo adicional para el equipo?

David Pastor: Sí, absolutamente. Tuvimos reuniones muy largas con todos los departamentos, intentando encontrar soluciones prácticas y creativas para cada secuencia.

Álex Pastor: Era una oportunidad única: hacer una película de gran escala que no se había hecho antes en este país, y demostrar que tenemos profesionales a la altura de cualquier producción americana.

5. ¿Cómo ha sido pasar de trabajar en Estados Unidos a hacerlo en España? ¿Y cómo es trabajar siendo hermanos?

Álex Pastor: Aquí los equipos técnicos no tienen nada que envidiar.

David Pastor: En España encontramos más libertad y una relación más horizontal con productores y financiadores. En EE. UU. todo es más político, más burocrático. Aquí hay menos interferencias externas, y eso lo valoramos mucho.

6. ¿El cine fantástico es vuestro género preferido?

Álex Pastor: Somos grandes fans del cine fantástico, pero como espectadores tenemos gustos muy amplios. Lo que nos gusta de este género es que nos permite tratar temas eternos a través de metáforas, y aportar un punto de vista original.

David Pastor: Al final uno trabaja con lo que le sale de dentro. No elegimos racionalmente una dirección; si forzamos las ideas, no funcionan. Lo que escribimos es lo que nace espontáneamente.

7. ¿Qué proyectos tenéis en mente para el futuro?

Álex Pastor: Tenemos dos o tres proyectos en el aire ahora mismo. Lo complicado es decidir cuál será el siguiente, porque nunca sabes cuál se concretará. Los Últimos Días no era el proyecto previsto después de Infectados, pero las circunstancias cambian. No queremos decir mucho por si lo gafamos (ríe).

Esther Soledad Esteban Castillo